Un grave episodio de violencia vial sacudió a la ciudad de Córdoba cuando un conductor embistió dos veces, de manera deliberada, a un automóvil en el que viajaba una familia, provocando una fractura de cráneo a un bebé de 18 meses. El hecho ocurrió en la Costanera Norte, a la altura del puente Santa Fe, y quedó registrado por cámaras de seguridad, cuyas imágenes se viralizaron rápidamente en redes sociales y medios locales.

Según la reconstrucción de los hechos, la madrugada del incidente comenzó con una discusión de tránsito entre Juan Cruz Peracca, de 29 años, al volante de una camioneta Volkswagen Amarok, y Alexis Enea Petrópulos, conductor de un Volkswagen Up. Tras una serie de insultos y bocinazos, ambos vehículos se detuvieron. Fue entonces cuando Peracca embistió en dos ocasiones al auto menor, ignorando los gritos de la madre que advertía sobre la presencia de su hijo en el asiento trasero.

El segundo impacto fue el más violento y provocó que el bebé saliera despedido de su sillita, sufriendo una fractura de cráneo. A pesar de la gravedad de la lesión, los médicos informaron que el niño no presenta compromiso neurológico y su evolución es favorable, aunque permanece internado bajo observación.

La fiscal Claudia Palacios imputó a Peracca por lesiones leves dolosas agravadas por alevosía y ordenó su detención en la cárcel de Bouwer. Sin embargo, la familia de la víctima, representada por el abogado Esteban Yangüez Papagenadio, exige que el caso sea investigado como tentativa de homicidio, argumentando que el acusado actuó con pleno conocimiento de la presencia del menor en el vehículo.

El caso tomó mayor relevancia al conocerse que Peracca cuenta con antecedentes judiciales por resistencia a la autoridad, desobediencia y acoso, además de vínculos familiares en el ámbito judicial provincial. Tras el hecho, el acusado habría intentado amedrentar a la familia exigiendo el pago por los daños de su camioneta, lo que motivó una orden de restricción que, según la causa, fue incumplida.

La investigación continúa y la fiscalía evalúa la posibilidad de agravar la imputación. El episodio reavivó el debate sobre la violencia vial y la respuesta judicial ante conductores con antecedentes reiterados, mientras la sociedad cordobesa sigue de cerca la evolución del caso y la salud del menor.