Un operativo policial realizado este jueves en la ciudad de Santa Fe culminó con la detención de tres hombres oriundos de Córdoba, acusados de integrar una banda dedicada al robo de pertenencias en vehículos mediante el uso de inhibidores de señal. El procedimiento, que tuvo lugar en la intersección de Bulevar Gálvez y Alvear, fue el resultado de una investigación iniciada tras la denuncia de una víctima que sufrió el robo de una mochila en la zona de 9 de Julio e Hipólito Yrigoyen, en pleno microcentro santafesino.

Según informaron fuentes del Ministerio de Justicia y Seguridad provincial, los delincuentes utilizaban dispositivos electrónicos capaces de bloquear la señal del cierre centralizado de los automóviles, lo que les permitía sustraer objetos del interior sin forzar puertas ni romper cristales. La Policía de Investigaciones (PDI) desplegó un operativo que incluyó el análisis de cámaras de seguridad, rastreo electrónico y patrullajes en la zona céntrica, logrando identificar el vehículo en el que se movilizaban los sospechosos.

La persecución finalizó frente al Colegio Adoratrices, donde los tres hombres fueron interceptados y aprehendidos. En el interior del automóvil se halló un dispositivo inhibidor de señal, considerado clave para la causa. Los objetos robados fueron recuperados y la causa quedó a cargo del fiscal de Flagrancia en turno del Ministerio Público de la Acusación, que dispuso la continuidad de las actuaciones judiciales y la detención de los implicados.

Leandro Ataide, del Ministerio de Seguridad, explicó que este tipo de delitos responde a un patrón ya identificado, con bandas provenientes de Córdoba que actúan en distintas ciudades, especialmente en fechas de mayor circulación de dinero o en vísperas de fiestas. "El mejor consejo es chequear que la puerta quede cerrada", recomendó el funcionario, subrayando la importancia de la prevención y la denuncia ciudadana.

El uso de inhibidores de señal para robos en vehículos es una modalidad en crecimiento, lo que genera preocupación en la comunidad y refuerza la necesidad de medidas de seguridad adicionales. Las autoridades continúan investigando posibles conexiones con otros hechos similares y advierten sobre la expansión de esta tecnología delictiva en la región.