El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, encabezó una masiva reunión en Ensenada con más de 200 dirigentes de Fuerza Patria, en el marco de la preparación para las elecciones nacionales del 26 de octubre. El encuentro, realizado en el camping del Sindicato de Obras Sanitarias de la Provincia de Buenos Aires (SOSBA), reunió a 82 intendentes, candidatos y referentes de distintos sectores del peronismo bonaerense, con el objetivo de fortalecer la campaña electoral y consolidar la unidad del espacio.

La convocatoria incluyó figuras como Máximo Kirchner, Juan Grabois, Guillermo Moreno y Jorge Taiana, quien encabeza la lista de candidatos a diputados nacionales. Sergio Massa, otro referente clave, no pudo asistir por motivos de agenda internacional. Durante la reunión, Kicillof instó a los presentes a "redoblar esfuerzos" y "militar" la boleta de Fuerza Patria, enfatizando la necesidad de repetir la contundente victoria obtenida el 7 de septiembre, cuando el peronismo superó a La Libertad Avanza por casi 14 puntos de diferencia.

El gobernador remarcó que la estrategia de campaña se mantendrá, con recorridas territoriales, inauguraciones de obras y actividades conjuntas hasta el 1 de octubre, fecha límite para actos de gestión según el cronograma electoral. "Equipo que gana no se toca", señalaron desde su entorno, destacando la importancia de mostrar gestión y cercanía con los vecinos en un contexto de recortes presupuestarios y dificultades económicas.

La reunión fue a puertas cerradas y con micrófono abierto, permitiendo la participación activa de todos los dirigentes presentes. Se repasaron los resultados de las elecciones provinciales y se definieron los lineamientos para la campaña nacional, con el objetivo de "poner un freno a Milei" y fortalecer el espacio en el Congreso.

En paralelo, se programaron movilizaciones y actividades simbólicas, como la caravana del 17 de octubre, Día de la Lealtad, y encuentros en la sede del Partido Justicialista. La interna del peronismo se mantiene controlada, con Cristina Kirchner como garante de la unidad, mientras que La Libertad Avanza enfrenta dificultades internas y busca redefinir su estrategia tras la derrota.

Dirigentes como Mayra Mendoza subrayaron la responsabilidad de los líderes políticos ante la situación social, mientras que Carlos Bianco calificó la elección como un "plebiscito" sobre las políticas nacionales y provinciales. Por su parte, La Libertad Avanza admitió errores y prometió una "profunda autocrítica" para recuperar apoyo en octubre. El peronismo bonaerense apuesta a la gestión territorial y la exhibición de obras públicas como principal eje de campaña, en contraste con el modelo libertario.