El hallazgo del cuerpo sin vida de Franco Patricio Aracena, de 31 años, en su departamento de Guaymallén, Mendoza, conmocionó a la comunidad local. El hecho fue descubierto el martes por la tarde, luego de que vecinos alertaran a la policía sobre la puerta entreabierta y la ausencia del joven durante todo el fin de semana. Al ingresar al domicilio, los efectivos encontraron a Aracena maniatado, amordazado y con evidentes signos de violencia en el rostro.

Según fuentes policiales, el crimen habría ocurrido el viernes anterior, alrededor de las 21:00, cuando testigos vieron a dos hombres sospechosos salir del departamento con una bicicleta y dejar la puerta abierta. Además, se observó una moto negra sin patente merodeando la zona. La fiscal de Homicidios, Claudia Ríos, dispuso la intervención de la División Homicidios y la Policía Científica, quienes realizaron peritajes en la escena y levantaron rastros para identificar a los autores.

La investigación se centra en determinar si el móvil fue un robo, ya que faltan objetos personales como una bicicleta y un celular, o si se trató de un ajuste de cuentas o conflicto personal. No se encontraron signos de forzamiento en la puerta, lo que sugiere que la víctima pudo haber conocido a sus agresores o que estos aprovecharon un descuido para ingresar.

El caso generó temor y preocupación entre los vecinos del barrio Unimev, quienes relataron haber escuchado ruidos extraños y notado movimientos inusuales en el complejo de departamentos. La fiscalía continúa analizando cámaras de seguridad de la zona y tomando declaraciones para reconstruir los últimos movimientos de Aracena y esclarecer el móvil del crimen.

Mientras tanto, la comunidad espera respuestas y mayor seguridad, en medio de la conmoción por la violencia del hecho. Las autoridades no descartan ninguna hipótesis y mantienen abiertas varias líneas de investigación, a la espera de avances en la identificación de los sospechosos y la resolución del caso.