A tres semanas de las elecciones generales, el presidente Javier Milei ha intensificado su campaña electoral con una serie de actos en cinco provincias argentinas, en un intento por fortalecer la posición de La Libertad Avanza tras el reciente escándalo que involucra a José Luis Espert. La agenda de Milei incluye visitas a Mar del Plata, Mendoza, Santa Cruz, Chaco y Corrientes, donde acompañará a los principales candidatos de su espacio político y buscará recomponer la imagen del oficialismo en distritos clave.

El inicio de la semana estuvo marcado por la presentación del libro de Milei, "La Construcción del Milagro", en el Movistar Arena, evento que contó con la presencia de su Gabinete y un show musical. Posteriormente, el mandatario tiene previsto participar en la inauguración de una planta en Mar del Plata junto al intendente Guillermo Montenegro, y en un almuerzo de la Cámara de Comercio de San Rafael, Mendoza, junto al gobernador Alfredo Cornejo y el ministro de Defensa, Luis Petri. En Santa Cruz, la agenda aún no está completamente definida, pero se espera que Milei participe en actividades junto al candidato a diputado Jairo Guzmán.

El escándalo que rodea a José Luis Espert, acusado de vínculos con el narcotráfico, ha generado tensiones internas en el oficialismo y rechazo en parte del electorado. A pesar de la presión de su entorno, Milei ha decidido mantener a Espert en la lista bonaerense, lo que ha provocado debates y malestar en la campaña. El caso ha impactado en la percepción pública y en la estrategia de comunicación del Gobierno, que busca recuperar terreno tras una derrota en la provincia de Buenos Aires.

En paralelo, se anticipan cambios significativos en el Gabinete tras las elecciones, con la posible salida de figuras como Patricia Bullrich y Luis Petri. El oficialismo también explora alianzas con sectores del PRO y otros partidos, en un contexto de dificultades económicas y necesidad de asegurar la gobernabilidad. El viaje de Milei a Estados Unidos, donde será recibido oficialmente por la Casa Blanca, apunta a reforzar la alianza geopolítica con la administración Trump y a proyectar una imagen de estabilidad internacional.

La campaña de Milei se desarrolla en un clima de alta polarización y expectativas sobre reformas económicas y políticas. El resultado de las elecciones y las definiciones sobre el futuro Gabinete serán determinantes para el rumbo del Gobierno en la segunda mitad de su mandato.