Se apaga un gigante lácteo: debe sueldos desde abril y desapareció de las góndolas
- Crisis en la industria láctea argentina: SanCor, La Suipachense, ARSA y Verónica al borde de la quiebra. - Deudas millonarias, plantas paralizadas y miles de empleos en riesgo. - Impacto social y económico en pueblos del interior. 🥛⚠️

:quality(85):max_bytes(102400)/https://assets.iprofesional.com/assets/jpg/2025/06/598384.jpg)
La industria láctea argentina enfrenta una de sus peores crisis en décadas, con cuatro de sus principales empresas —SanCor, La Suipachense, ARSA y Lácteos Verónica— al borde de la quiebra. La situación, que afecta a más de 2.200 trabajadores directos y a miles de familias en el interior del país, se caracteriza por deudas millonarias, plantas paralizadas y una caída drástica en la producción.
SanCor, que supo ser la mayor cooperativa láctea del país, acumula deudas salariales desde abril y apenas sostiene su actividad a través de contratos de producción para terceros. La empresa debe el 100% de los sueldos de mayo a agosto y ha perdido casi toda su presencia en supermercados. Según fuentes del sector, "la supervivencia de la compañía está atada a la buena voluntad de los acreedores" y la posibilidad de quiebra es inminente.
En la localidad bonaerense de Suipacha, la histórica planta de La Suipachense permanece tomada por sus empleados tras el despido de nueve trabajadores y el atraso en el pago de salarios. La producción está completamente paralizada y la incertidumbre crece entre los habitantes, ya que la fábrica es uno de los principales motores económicos del pueblo. "Cada día que pasa es más difícil. No hay certezas sobre cuándo se va a destrabar y eso genera desesperación", reconocen fuentes cercanas a la empresa.
ARSA y Lácteos Verónica atraviesan situaciones similares, con plantas cerradas, despidos masivos y denuncias de vaciamiento. El gremio ATILRA ha presentado denuncias penales y advierte sobre el riesgo de cierre definitivo, mientras que los intentos de reestructuración y búsqueda de inversores no han dado resultados concretos.
La crisis tiene raíces profundas: desde 2017, el sector arrastra problemas de gestión, caída del consumo interno, altos costos y falta de financiamiento. La llegada de segundas marcas y la importación de leche uruguaya han intensificado la competencia, agravando el panorama para las empresas tradicionales.
El impacto social es significativo. En pueblos como Suipacha y Arenaza, la paralización de las plantas afecta no solo a los trabajadores, sino también a proveedores, comercios y a la economía local en general. La comunidad ha respondido con marchas y muestras de apoyo a los empleados, pero la incertidumbre persiste.
A pesar de algunos intentos de diálogo y propuestas de reactivación, la falta de acuerdos y la magnitud de las deudas hacen que el futuro de estas empresas sea cada vez más incierto. El sector lácteo argentino, clave para la economía regional, enfrenta así un desafío sin precedentes, con consecuencias que podrían extenderse a toda la cadena productiva y social.
Entidades Mencionadas
Artículos Relacionados

Franco Bindi, apuntado por los audios de Karina: un abogado audaz que siempre se movió en las sombras del poder
6 de septiembre de 2025

Sorpresa en las encuestas a horas de la votación en la Provincia de Buenos Aires: el dato que mira Milei
6 de septiembre de 2025

Milei regresa de Beverly Hills sin galardones ni anuncios de inversiones
6 de septiembre de 2025
Fuentes
Análisis de Fuentes
Comparación entre las fuentes de información utilizadas para este análisis en diferentes dimensiones.