El caso que conmociona a Jujuy ha dado un nuevo giro en las últimas horas. Matías Jurado, acusado formalmente de dos homicidios y sospechado de haber cometido al menos tres más, enfrenta una investigación cada vez más compleja tras la localización de su expareja, cuyo testimonio es considerado clave por los fiscales. La mujer fue localizada y su declaración tomada el jueves, aunque los detalles de su testimonio no han trascendido públicamente.

Jurado permanece detenido en el penal de Gorriti, bajo un régimen de máxima seguridad y aislamiento, mientras se analizan más de 200 muestras genéticas recolectadas en su domicilio del barrio Alto Comedero, en [San Salvador de Jujuy](/entities/entity_1744896168028_269). Entre las pruebas, se han identificado restos de Jorge Anachuri y Sergio Sosa, dos de las víctimas confirmadas, mientras que otros perfiles genéticos hallados en la vivienda están pendientes de identificación. El fiscal Guillermo Beller confirmó que los trabajos se centran ahora en determinar la identidad de las posibles víctimas adicionales.

La investigación ha revelado detalles escalofriantes sobre el modus operandi atribuido a Jurado. Según el testimonio de su sobrino adolescente, el acusado lo obligaba a ausentarse durante horas, y se presume que las víctimas eran sometidas, descuartizadas y sus restos calcinados o embolsados para ser descartados en basurales cercanos. Herramientas, bolsas y recipientes de comida para perros con restos humanos forman parte de la evidencia recolectada.

El Equipo Argentino de Antropología Forense se sumó a la investigación, realizando excavaciones y colaborando en el análisis de los elementos encontrados. La fiscalía ha recomendado evitar el uso del término "asesino serial" por respeto a las familias, sugiriendo la tipificación de "asesino múltiple" para este caso, el primero de su tipo registrado en la provincia.

La comunidad jujeña permanece conmocionada ante los avances del caso, mientras Jurado insiste en su inocencia y rechaza visitas familiares y de su abogado. El desarrollo de la causa y la identificación de nuevas víctimas podrían marcar un precedente en la historia judicial de Jujuy, donde la búsqueda de justicia y respuestas continúa.