El juicio oral por la causa Cuadernos se reanudó este mes con una serie de audiencias clave en el Tribunal Oral Federal N°7, donde se investiga la presunta existencia de una asociación ilícita dedicada al cobro de sobornos para la adjudicación de obras públicas durante los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner. La expresidenta Cristina Kirchner, junto a exfuncionarios y empresarios, enfrenta acusaciones por haber liderado un esquema de recaudación ilegal que, según la fiscalía y la Unidad de Información Financiera (UIF), funcionó entre 2003 y 2015.

Las audiencias, que se desarrollan de manera virtual y presencial, están programadas para los días 9, 11, 16 y 18 de diciembre. En ellas, se leen los capítulos centrales de la acusación, incluyendo el inicio de la causa, los hechos investigados, los descargos de los imputados y los acuerdos de colaboración. El proceso involucra más de 85 imputados y abarca expedientes conexos como las causas "Trenes" y "Corredores Viales", donde se investigan maniobras ilícitas en la concesión de peajes y transporte ferroviario.

Durante las últimas jornadas, el tribunal rechazó intentos de recusación presentados por la defensa del exministro Julio De Vido, lo que permitió avanzar con el cronograma de audiencias. Los testimonios de empresarios y arrepentidos, como José López, Carlos Wagner y Ernesto Clarens, han sido fundamentales para desentrañar el mecanismo de corrupción. Las pruebas presentadas incluyen las anotaciones del chofer Oscar Centeno, documentos de la UIF y declaraciones de colaboradores, que detallan pagos de hasta 1,5 millones de dólares y la redistribución de fondos entre funcionarios.

La acusación sostiene que el sistema de recaudación ilegal contó con dos canales independientes: uno integrado por funcionarios públicos que recaudaban dinero en efectivo garantizado por empresarios, y otro conformado por empresarios que gestionaban los asuntos financieros. El dinero era entregado en domicilios particulares, la Residencia de Olivos y la Casa de Gobierno, y parte de estos fondos era redistribuida o utilizada para pagos a otros funcionarios.

La defensa de los acusados, en particular la de Cristina Kirchner, ha cuestionado la imparcialidad del tribunal y las condiciones de detención, denunciando restricciones excesivas y falta de garantías procesales. Por su parte, la fiscalía y la UIF insisten en la existencia de una estructura piramidal liderada por los Kirchner, con fines ilícitos y una logística aceitada para la recaudación de fondos ilegales.

El juicio por la causa Cuadernos representa uno de los mayores desafíos judiciales en la historia reciente de Argentina, con implicaciones políticas y sociales de gran alcance. El proceso continuará en los próximos meses, con la expectativa de nuevas declaraciones y la resolución de los expedientes conexos, mientras el tribunal mantiene su compromiso con la transparencia y la regularidad del cronograma.