Un incendio forestal de grandes proporciones se desató el viernes en la ladera del cerro Runge, en pleno centro de San Carlos de Bariloche, generando alarma entre vecinos y poniendo en riesgo viviendas, un sanatorio y la seguridad de los transeúntes. El foco ígneo, que se originó cerca del Sanatorio San Carlos, avanzó rápidamente debido a la presencia de pastizales secos y fuertes ráfagas de viento, obligando a la intervención de decenas de bomberos, brigadistas y organismos de emergencia.

Según informaron fuentes judiciales y de Defensa Civil, la causa probable del incendio fue la manipulación negligente de una amoladora por parte de un empleado de mantenimiento del sanatorio. Las chispas generadas por la herramienta encendieron el pastizal, propagando el fuego por la pendiente y poniendo en riesgo edificaciones cercanas y la vida de pacientes y vecinos. "Esto no fue un accidente, fue una negligencia que podía haberse evitado", afirmó el fiscal Facundo D'Apice, quien imputó al operario por "incendio culposo" y solicitó un plazo de cuatro meses para completar la investigación.

El siniestro, que comenzó alrededor de las 13:27, fue registrado por cámaras de seguridad y confirmado por peritajes preliminares. La rápida propagación de las llamas llevó a la evacuación preventiva de pacientes y personal del sanatorio, así como a la autoevacuación de vecinos del barrio Belgrano. El operativo de emergencia incluyó el uso de aviones hidrantes y la colaboración de bomberos voluntarios, SPLIF, Parques Nacionales y la Policía de Río Negro, logrando controlar el incendio en pocas horas y evitar daños mayores.

No se registraron víctimas fatales, aunque un bombero debió ser asistido por inhalación de humo. Las autoridades municipales y provinciales advirtieron sobre el alto índice de peligrosidad de incendios en la región y llamaron a extremar las medidas de prevención. El municipio anunció que presentará acciones contra los propietarios de terrenos por falta de manejo forestal, señalando que "el riesgo de no tener un control adecuado sobre estos espacios es muy grande".

El incidente reavivó el debate sobre la responsabilidad compartida en la prevención de incendios y la necesidad de aplicar la normativa vigente, que exige tanto a entes públicos como a privados implementar estrategias de manejo forestal. Mientras continúan las tareas de vigilancia y enfriamiento en la zona afectada, las autoridades insisten en la importancia de la prevención para evitar futuras tragedias.