Un joven de 26 años, identificado como Alejo Fabián Riveros, fue encontrado muerto en la madrugada del sábado 25 de abril en una barbería ubicada en la calle México al 1200 bis, en el barrio Larrea, al noroeste de Rosario. El cuerpo presentaba heridas de arma blanca en el cuello y la nuca, según confirmaron fuentes policiales y del Sistema Integrado de Emergencias Sanitarias (SIES).

El hallazgo fue realizado por un familiar de la víctima, quien alertó a las autoridades tras encontrar el cuerpo tendido en el suelo del local. Personal del Comando Radioeléctrico y del gabinete criminalístico se hicieron presentes en el lugar para realizar las primeras pericias. Según los informes preliminares, no se encontraron signos de robo ni desorden en el establecimiento, lo que descarta un posible móvil de robo.

La fiscal María de los Ángeles Granato, de la Unidad de Homicidios Dolosos, está a cargo de la investigación. Entre las medidas adoptadas se incluyen el traslado del cuerpo al Instituto Médico Legal para la realización de una autopsia, el relevamiento de pruebas en la escena del crimen y la toma de testimonios a familiares y vecinos de la víctima. "Estamos trabajando para esclarecer los motivos detrás de este ataque y dar con los responsables", señaló la fiscal.

Vecinos de la zona describieron a Riveros como un joven "común" y expresaron su sorpresa ante el violento suceso. "Era una persona tranquila, no entendemos qué pudo haber pasado", comentó un residente del barrio. Sin embargo, algunos señalaron que el tipo de ataque, con heridas de arma blanca, podría indicar un trasfondo más complejo.

Este caso se suma a una serie de homicidios que han sacudido a Rosario en los últimos meses, aumentando la preocupación de la comunidad y la presión sobre las autoridades locales para resolver estos crímenes. La barbería, que también era el lugar de trabajo habitual de la víctima, permanece cerrada mientras continúan las investigaciones.

Las autoridades han solicitado la colaboración de la ciudadanía para aportar cualquier información que pueda ser relevante para el caso. Mientras tanto, la familia de Riveros se encuentra en estado de shock y espera respuestas sobre lo ocurrido. "Queremos justicia y que se sepa la verdad", expresó un allegado a la víctima.