El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) emitió un alerta amarillo por tormentas fuertes para el viernes en Mar del Plata, lo que generó preocupación entre los residentes. Las lluvias comenzaron en las últimas horas del día, acompañadas de actividad eléctrica, ráfagas de viento de hasta 60 km/h y ocasional caída de granizo. Las precipitaciones acumuladas oscilaron entre 40 y 70 milímetros, causando anegamientos en algunas calles de la ciudad, especialmente en zonas bajas y transitadas.

Ante estas condiciones, el SMN recomendó evitar actividades al aire libre, no sacar la basura y mantenerse informado a través de las autoridades locales. También se sugirió tener lista una mochila de emergencias con elementos básicos como linterna, radio y documentos.

Sin embargo, el sábado amaneció con una notable mejora en las condiciones climáticas. El cielo despejado y las temperaturas moderadas, con mínimas de 10°C y máximas de 16°C, marcaron el inicio de un fin de semana agradable. Los vientos, aunque presentes, no generaron mayores complicaciones, y la humedad descendió significativamente, alcanzando el 76%.

La mejora del clima permitió a los residentes y turistas disfrutar de actividades al aire libre, dejando atrás las complicaciones del viernes por la noche. Según el SMN, estas condiciones favorables continuarán el domingo, con cielos parcialmente nublados y temperaturas ligeramente más altas.

Este evento climático se enmarca en un otoño benigno en Mar del Plata, caracterizado por temperaturas moderadas y pocas precipitaciones significativas. Las autoridades locales, como Defensa Civil, estuvieron en alerta durante las tormentas, aunque no se reportaron incidentes graves. Los medios locales destacaron la importancia de seguir las recomendaciones del SMN para minimizar riesgos durante eventos climáticos adversos.

En resumen, tras un inicio complicado con tormentas fuertes, el fin de semana en Mar del Plata se presenta como una oportunidad para disfrutar de un clima agradable y actividades al aire libre, en un contexto de mejora constante de las condiciones meteorológicas.