La ciudad de San Salvador de Jujuy fue escenario de una tragedia que conmocionó a la provincia. El pasado martes, vecinos del barrio El Chingo alertaron a las autoridades tras observar humo saliendo de una vivienda. Al ingresar, sofocaron un principio de incendio y presenciaron la huida del joven que residía en el lugar. Minutos más tarde, el mismo joven, de 19 años, fue visto estrellando su automóvil contra la baranda del puente San Martín y arrojándose al vacío sobre el río Grande. Fue rescatado con vida, pero falleció horas después en el hospital Pablo Soria debido a las graves lesiones sufridas.

Simultáneamente, en la vivienda, personal de Criminalística y del Ministerio Público de la Acusación halló el cuerpo sin vida de la madre del joven, una mujer de aproximadamente 56 a 60 años. El cadáver, envuelto en frazadas y sábanas, presentaba al menos 14 heridas de arma blanca en el abdomen, pecho y cuello, y mostraba signos de descomposición avanzada. La autopsia determinó que la muerte se produjo entre 10 y 17 días antes del hallazgo, por shock hemorrágico.

Las investigaciones, encabezadas por el fiscal Diego Cussel, apuntan a un parricidio seguido de suicidio. Según los testimonios de vecinos, madre e hijo llevaban una vida aislada, sin antecedentes de violencia familiar ni denuncias previas. El joven, estudiante de informática, convivió con el cuerpo de su madre durante más de dos semanas antes de intentar ocultar el crimen provocando un incendio en la vivienda.

No se encontraron signos de ingreso forzado ni indicios de participación de terceros. Se secuestraron cuchillos, teléfonos celulares y una computadora para realizar pericias que permitan esclarecer el móvil del crimen. El fiscal Cussel explicó que, de confirmarse la autoría del joven, la acción penal se extingue por fallecimiento, conforme al Código Penal.

El caso ha generado conmoción en la comunidad jujeña, donde la historia de una madre asesinada por su hijo y el posterior suicidio del joven se ha convertido en símbolo de la fragilidad de los lazos familiares y la importancia de la contención emocional. Las autoridades continúan investigando para determinar los motivos y el contexto emocional que desencadenaron la tragedia, mientras psicólogos forenses destacan la complejidad del vínculo familiar y la necesidad de analizar posibles factores psicológicos involucrados.