El accidente fatal ocurrido el pasado 8 de junio en la Ruta 88, cerca de Miramar, sigue generando debate y controversia tras un giro inesperado en la causa judicial. El médico Diego Quirós y su hijastro Iñaki Mendizábal perdieron la vida al impactar su vehículo contra un camión que presentaba varias irregularidades, entre ellas la falta de Verificación Técnica Vehicular (VTV) y luces deficientes. El conductor del camión, Raúl Lozano García, fue inicialmente detenido e imputado por homicidio culposo agravado.

Sin embargo, recientes pericias toxicológicas y accidentológicas arrojaron que Quirós conducía bajo los efectos de cocaína y a una velocidad superior a la permitida. Estos resultados llevaron al juez de Garantías Daniel De Marco a dictar la falta de mérito y ordenar la liberación de Lozano García, quien había estado varias semanas detenido en la Unidad Penal Nº 44 de Batán, en Mar del Plata. El magistrado sostuvo que la conducta de la víctima tuvo una "trascendental incidencia en el desenlace fatal", minimizando el peso de las irregularidades del camión y su conductor.

La decisión judicial fue inmediatamente apelada por la familia de las víctimas y el fiscal Rodolfo Moure, quienes cuestionaron la validez de las pericias y la interpretación del juez. "La existencia de cocaína en sangre no significa que al momento del hecho la persona estuviese bajo los efectos", argumentó Moure, quien también señaló que la velocidad del vehículo no pudo ser determinada con precisión en el momento del impacto. La familia, representada por el abogado Juan Manuel Belliure, calificó el fallo como un "acto de arbitrariedad manifiesta" y solicitó la recusación del juez por "prejuzgamiento".

Por su parte, la defensa del camionero enfatizó que las pruebas periciales demostraron que las infracciones del conductor del camión no fueron determinantes en la tragedia. El expediente judicial incluyó croquis, informes accidentológicos y testimonios que respaldaron esta postura.

El caso ha reavivado el debate sobre la seguridad vial en la Ruta 88, una vía señalada por su peligrosidad y falta de señalización adecuada. El fiscal Moure advirtió sobre la necesidad de mejorar las condiciones de la ruta y la responsabilidad del Estado en la prevención de accidentes. Mientras tanto, la comunidad de Miramar y los familiares de las víctimas esperan una resolución definitiva y mayor seguridad en el tránsito de la región.