Un violento episodio de violencia de género y enfrentamiento armado sacudió el barrio Casiano Casas de Rosario en la madrugada del domingo. Cristian Ariel Oficialdegui, un policía de 47 años que se encontraba fuera de servicio y con licencia psiquiátrica desde abril de 2023, intentó secuestrar a su expareja a punta de pistola. El hecho culminó con su muerte tras un enfrentamiento con Gendarmería Nacional.

Según informaron fuentes oficiales, Oficialdegui llegó a la vivienda de su ex, ubicada en Pavlov al 1300, y la obligó a subir a su vehículo, un Renault Mégane. Sin embargo, la mujer logró escapar tras recorrer unas cuadras y regresó a su domicilio. Lejos de desistir, el agresor volvió al lugar armado con dos pistolas, disparando al aire y amenazando a los vecinos que intentaban calmarlo.

Alertados por los vecinos, efectivos de Gendarmería Nacional arribaron al lugar alrededor de las 6:30 de la mañana. En ese momento, Oficialdegui, en un estado de alteración, disparó contra los gendarmes, hiriendo a uno de ellos en el pie. La respuesta de los efectivos fue inmediata: tres disparos acabaron con la vida del agresor.

El fiscal Lisandro Artacho, a cargo de la investigación, confirmó que Oficialdegui no llevaba uniforme ni armas reglamentarias, aunque portaba un chaleco antibalas. En la escena del crimen se secuestraron dos armas de fuego de calibres 32 y 40. Además, se ordenó la intervención de Asuntos Internos y del Gabinete Criminalístico de la Policía de Investigaciones para esclarecer los hechos.

Oficialdegui tenía antecedentes de episodios violentos. En 2018, fue detenido por agredir a un inspector de tránsito, y en 2022, por exhibir un arma en una discusión. Este historial, sumado a su licencia psiquiátrica, plantea interrogantes sobre los controles al personal de seguridad.

El gendarme herido fue trasladado al Hospital Eva Perón y se encuentra fuera de peligro. Mientras tanto, la comunidad de Casiano Casas sigue conmocionada por el incidente, que pone en evidencia la gravedad de la violencia de género y la necesidad de medidas preventivas más estrictas en casos de personal de seguridad con antecedentes psiquiátricos o de violencia.