El Gobierno nacional oficializó el reconocimiento de la Santísima Virgen María, bajo la advocación de Nuestra Señora de Luján, como Comandante Generala de la Gendarmería Nacional Argentina. La medida, publicada en el Boletín Oficial el 19 de septiembre de 2025, fue firmada por el presidente Javier Milei y la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich.

Según el decreto, la devoción a la Virgen de Luján tiene un significado especial para los integrantes de la Gendarmería y está profundamente arraigada en la historia y la identidad de la fuerza. El texto recuerda que, en 1958, la Santa Sede admitió el patronazgo de la Virgen sobre las fuerzas armadas argentinas, y que en 1975 se la declaró patrona de la Gendarmería Nacional.

El decreto instruye al jefe de la Gendarmería Nacional a adoptar las medidas necesarias para la entronización de la imagen de la Virgen y la realización de los honores militares pertinentes. "No hay elemento de la Gendarmería Nacional Argentina que no tenga entronizada y no sea venerada una imagen suya, provocando en sus hombres y mujeres una energía moral suficiente para una mayor entrega al servicio en el cumplimiento de su deber", señala el documento oficial.

La decisión cuenta con el respaldo del Obispo Castrense y de las autoridades jurídicas de la fuerza y del Ministerio de Seguridad. El reconocimiento de la Virgen de Luján como Comandante Generala se inscribe en la tradición de honrar a santos patronos con el grado máximo en la categoría de Personal Superior dentro de las fuerzas armadas argentinas.

Hasta el momento, no se han registrado reacciones públicas contrarias a la medida en las fuentes consultadas. El decreto refuerza la identidad religiosa y simbólica en la Gendarmería Nacional, en línea con la historia institucional y la devoción popular en Argentina.