El hallazgo de un cuerpo en la costa de Caleta La Misión, cerca del puerto de Río Grande en Tierra del Fuego, generó conmoción en medio de la búsqueda de Pedro Kreder y Juana Morales, la pareja de jubilados desaparecida desde el 11 de octubre en Chubut. En un primer momento, la aparición de los restos encendió las alarmas entre los investigadores y la comunidad, ante la posibilidad de que se tratara de alguno de los adultos mayores cuyo paradero es desconocido desde hace seis semanas.

Sin embargo, tras los estudios forenses realizados por la Policía Científica, se confirmó que el cuerpo correspondía a Sergio Gabriel Schlieter Barría, un hombre de 32 años que había desaparecido hacía 20 días en la provincia fueguina. La identificación se logró mediante el cotejo de huellas dactilares y la verificación de un tatuaje, información que fue aportada por la familia del joven. La jueza María Rosa Santana, a cargo de la investigación, indicó que aún se esperan los resultados de la autopsia y los análisis toxicológicos para determinar la causa de muerte, sin descartar ninguna hipótesis, incluyendo accidente, suicidio o intervención de terceros.

El hallazgo, aunque desvinculado del caso de los jubilados, reavivó la preocupación y el interés público por la desaparición de Kreder y Morales. El ministro de Seguridad de Chubut, Héctor Iturrioz, señaló que los operativos de búsqueda continúan activos y que no se descarta ninguna línea investigativa. "Mi tesitura es que se los tragó el mar", afirmó, aunque reconoció la falta de pistas firmes y la dificultad creciente de encontrarlos con vida. Por su parte, los familiares de los desaparecidos confirmaron que el cuerpo hallado no pertenecía a ninguno de ellos y mantienen la esperanza de hallarlos.

Las autoridades han intensificado los rastrillajes, incorporando perros especializados y tecnología avanzada para la detección de restos humanos. El último indicio concreto sobre la pareja fue la aparición de su camioneta en Comodoro Rivadavia y las imágenes de cámaras de seguridad que los mostraban viajando solos. El caso sigue abierto y la región permanece atenta a cualquier novedad, mientras la investigación sobre la muerte de Schlieter Barría continúa en paralelo.