La investigación sobre Matías Jurado, presunto responsable de una serie de homicidios en San Salvador de Jujuy, ha dado un giro significativo tras la localización de su ex pareja, cuyo testimonio es considerado clave por la Justicia. Jurado, de 37 años, enfrenta cargos formales por homicidio agravado en dos casos y es sospechado de haber cometido al menos tres asesinatos más. Los hechos han generado gran conmoción en la provincia, especialmente por el perfil de las víctimas, todas personas en situación de vulnerabilidad.

El domicilio de Jurado, ubicado en el barrio Alto Comedero, se convirtió en el epicentro de la investigación tras el hallazgo de restos humanos y material genético de al menos cuatro personas. Los análisis de ADN confirmaron la identidad de Jorge Anachuri y Sergio Sosa, cuyos restos fueron encontrados en la vivienda. Además, se identificaron otros perfiles genéticos que aún están pendientes de ser asociados a víctimas desaparecidas.

El fiscal Guillermo Beller confirmó que la ex pareja de Jurado fue localizada y que su declaración fue tomada por el Ministerio Público Fiscal, aunque no trascendieron detalles sobre su testimonio. "No podíamos dar con ella y era fundamental recabar su testimonio", señaló Beller. En paralelo, el sobrino adolescente de Jurado, quien convivía con él, aportó información relevante al declarar que su tío lo obligaba a ausentarse durante los hechos y que las víctimas eran descuartizadas y sus restos calcinados o descartados en bolsas de residuos.

Las autoridades secuestraron herramientas como palas, sierras y recipientes de comida para perros, donde también se hallaron restos humanos. El Equipo Argentino de Antropología Forense se sumó a la investigación, que cuenta con la colaboración de especialistas de otras provincias y la Gendarmería Nacional.

El fiscal Beller y el procurador general Sergio Lello Sánchez recomendaron a los medios evitar el uso del término "asesino serial" por respeto a las familias, sugiriendo la tipificación de "asesino múltiple". La comunidad jujeña permanece conmocionada, mientras la Justicia continúa con el cotejo de más de 200 elementos recolectados y no descarta la aparición de nuevas víctimas. El caso, que comenzó con la desaparición de cinco hombres entre enero y agosto, sigue abierto y bajo intensa atención pública.