Decathlon, la reconocida cadena francesa de artículos deportivos, confirmó su regreso a la Argentina tras más de veinte años de ausencia. La apertura de su primer local, originalmente prevista para octubre de 2025, se adelantó al viernes 26 de septiembre y tendrá lugar en el complejo Al Río, en Vicente López, Buenos Aires. El establecimiento, de 3000 metros cuadrados, estará estratégicamente ubicado entre un hipermercado Carrefour y una tienda Sodimac, replicando el exitoso modelo de cercanía con otras marcas que la empresa ha implementado en países vecinos como Uruguay y Paraguay.

La vuelta de Decathlon no es un hecho aislado, sino parte de un ambicioso plan de expansión regional. La compañía planea abrir entre 20 y 30 locales en distintas ciudades argentinas entre 2025 y 2026, con negociaciones avanzadas para nuevas tiendas en la Ciudad de Buenos Aires y otras urbes como Córdoba, Rosario, Mendoza, La Plata, Mar del Plata y Tucumán. El grupo inversor detrás del desembarco, Grupo One, ya opera la marca en Uruguay y Paraguay, y apuesta por una estrategia de valor y calidad para posicionarse como opción competitiva en el mercado argentino, a pesar de los desafíos como la volatilidad cambiaria y la importación de productos.

El nuevo local ofrecerá productos para más de 70 disciplinas deportivas, incluyendo natación, trekking, ciclismo, yoga y running, y contará con servicios tecnológicos e interactivos, como pantallas táctiles, áreas para probar productos y atención personalizada. El modelo de ventas será híbrido, combinando la experiencia física con ecommerce y retiro en tienda de pedidos online. "La misión de Decathlon es hacer accesible el deporte al mayor número de personas", señalaron sus directivos.

La expectativa generada por el regreso de Decathlon es alta, tanto entre consumidores como en el sector minorista deportivo, que anticipa un impacto significativo en la oferta y competencia. La presencia global de la marca, con más de 1.700 locales en 78 países y más de 100.000 colaboradores, refuerza la apuesta por consolidar su presencia en Latinoamérica y facilitar el acceso al deporte para todos los públicos. El plan de expansión contempla una inversión estimada de USD 200 millones y la posibilidad de alcanzar hasta 30 locales en ciudades con más de 300.000 habitantes, lo que podría dinamizar el sector y generar nuevas oportunidades comerciales en el país.