El pasado domingo, la ciudad de Tartagal, en la provincia de Salta, fue escenario de un doble homicidio que mantiene en vilo a la comunidad y a las autoridades locales. Fernando Gómez, de 46 años, y Rubén Gustavo Lira, de 36, fueron encontrados muertos en distintos puntos de la Ruta Nacional 86, apenas un día después de haber presentado una denuncia por robo agravado ante la Comisaría 3 de la ciudad.

Según fuentes judiciales y policiales, ambos hombres circulaban en un Fiat blanco por la localidad de General Mosconi cuando, en la intersección de avenida Juan XXIII y calle San Juan, se produjo una fuerte discusión que derivó en el ataque a Gómez. "El hombre de 35 años habría disparado contra su acompañante", detalló el fiscal penal Gonzalo Ariel Vega, quien encabeza la investigación. Gómez fue hallado sin vida en el interior del vehículo, con nueve heridas de arma de fuego, incluida una en la cabeza que habría provocado su muerte inmediata.

Tras el crimen, Lira tomó el control del automóvil y se dirigió hacia Tartagal, abandonando el cuerpo de Gómez sobre la ruta 86, a la altura del kilómetro 3. Posteriormente, Lira robó una motocicleta en un comercio local, amenazando al propietario con el arma de fuego. "Me dijo ‘dame las llaves de la moto o te cago matando’. Estaba re loco, le tuve que dar la moto", relató la víctima del robo.

La fuga de Lira culminó en el kilómetro 17 de la misma ruta, donde perdió el control del rodado y fue encontrado sin vida por la policía. La autopsia determinó que Lira no presentaba lesiones de arma de fuego ni arma blanca, sino que falleció por un traumatismo encéfalo craneano grave y una fractura expuesta en la pierna.

La investigación, a cargo de la Unidad de Graves Atentados contra las Personas de Tartagal, considera varias hipótesis, entre ellas una posible venganza vinculada al narcotráfico o una escalada de conflicto entre los propios denunciantes. Las autoridades continúan recolectando testimonios, analizando cámaras de seguridad y esperando los resultados definitivos de las autopsias para esclarecer las circunstancias de ambos decesos.

El caso ha generado preocupación en la comunidad local, especialmente por los antecedentes de las víctimas y la violencia registrada. El fiscal Vega subrayó la importancia de una investigación minuciosa para determinar responsabilidades y evitar nuevas escaladas de violencia en la región.