Un insólito operativo policial se desplegó este miércoles en un hotel alojamiento de la ciudad de Córdoba, ubicado sobre la avenida La Voz del Interior, tras una denuncia que alertaba sobre una pareja supuestamente armada y atrincherada en una de las habitaciones. El incidente, que movilizó al Equipo de Tácticas Especiales Recomendable (ETER), negociadores y al propio ministro de Seguridad provincial, Juan Pablo Quinteros, mantuvo en vilo a la zona norte de la capital durante varias horas.

La alarma se originó cuando el encargado del hotel, tras recibir la noticia de un robo en la casa de un conocido en barrio Villa Belgrano, sospechó que los autores del ilícito eran una pareja que acababa de hospedarse en el establecimiento. Según relató el encargado, escuchó frases como "voy a sacar el arma" provenientes de la habitación, lo que lo llevó a llamar al 911 y activar el protocolo de seguridad para casos de alto riesgo.

El operativo incluyó la evacuación de otras parejas presentes en el hotel y el acordonamiento total de la zona. La tensión aumentó cuando la pareja sospechosa se negó a salir de la habitación, lo que llevó a la intervención de negociadores y efectivos del ETER. Finalmente, los uniformados ingresaron por la fuerza y se encontraron con una escena muy distinta a la esperada: la pareja no portaba armas ni tenía relación alguna con el robo denunciado. El hombre, empleado de una empresa de seguridad privada, no llevaba consigo su arma reglamentaria y solo se halló dinero en el vehículo de la pareja.

Tras la verificación de los hechos, la fiscalía de distrito intervino y dispuso la liberación de la pareja, que no fue imputada por ningún delito. El Peugeot 206 en el que se trasladaban fue secuestrado preventivamente para peritajes, aunque todo apunta a que se trató de una confusión monumental.

Fuentes policiales resumieron el episodio como "una película" creada por el encargado del hotel, que interpretó erróneamente una conversación privada. El despliegue, considerado excesivo por la falta de elementos que justificaran la alarma, terminó siendo anecdótico y generó alivio entre las autoridades. El caso fue ampliamente comentado en los medios locales como un blooper policial, dejando como lección la importancia de verificar la información antes de activar protocolos de emergencia.