El hallazgo de restos humanos en la provincia de Entre Ríos podría dar un giro decisivo en la investigación por el asesinato de Martín Palacio, el remisero de 49 años que desapareció tras pactar un viaje con Pablo Laurta, actualmente detenido en Córdoba por el doble femicidio de Luna Giardina y Mariel Zamudio. El descubrimiento se produjo este miércoles, cuando un automovilista que circulaba por la Ruta 15, entre Rosario del Tala y Sauce Norte, encontró una bolsa negra con restos óseos que, según las autoridades, podrían pertenecer a Palacio.

La policía local y el Departamento Médico Forense de Paraná trabajan en la identificación de los restos, que incluyen un cráneo incompleto, piezas dentarias, huesos de extremidades y fluidos cadavéricos. El ministro de Seguridad de Entre Ríos, Néstor Roncaglia, afirmó que "en un 99% el cuerpo hallado corresponde a Martín Palacio", aunque aún faltan los resultados de las pericias de ADN para confirmar la identidad de manera definitiva.

El caso se remonta al 7 de octubre, cuando Palacio fue visto por última vez al encontrarse con Laurta en la terminal de ómnibus de Concordia. El destino del viaje era la ciudad de Rafaela, Santa Fe, pero Palacio nunca llegó. Días después, su auto apareció incendiado en Córdoba y, posteriormente, se halló un cuerpo mutilado en la zona de Colonia Yeruá, departamento Concordia, faltando la cabeza y los brazos.

Las investigaciones revelan que Laurta habría planeado los crímenes desde Uruguay, cruzando el río en una piragua y ocultando pruebas en distintos puntos de Entre Ríos y Córdoba. Las cámaras de seguridad y el rastreo de telefonía móvil fueron claves para reconstruir el recorrido del acusado y la víctima. Laurta fue detenido en Gualeguaychú junto a su hijo de cinco años, tras haber cometido el doble femicidio y secuestrado al menor.

La fiscal Emilce Reinoso y el Gabinete de Policía Científica de Tala lideran las pericias sobre los restos hallados, mientras que la jueza de Garantías de Concordia dictó prisión preventiva para Laurta. El acusado se negó a declarar y enfrenta cargos por homicidio criminis causae, que prevé prisión perpetua.

El caso ha generado conmoción en las provincias de Entre Ríos y Córdoba, y mantiene la atención pública por la complejidad y brutalidad de los hechos. Las autoridades continúan con los rastrillajes y análisis forenses, mientras la familia de Palacio espera la confirmación de la identidad y el avance de la causa judicial. La resolución del caso podría sentar precedentes en la investigación de crímenes complejos y transprovinciales en Argentina.