Tras seis días de intensa búsqueda, fue hallado sin vida Enzo Leandro de Oro, el joven de 28 años que había desaparecido el 7 de diciembre en Paso Córdoba, a orillas del río Negro, en General Roca. El hallazgo se produjo en la madrugada del sábado, a varios kilómetros aguas abajo del último lugar donde fue visto, en una zona de difícil acceso conocida como La Rinconada.

El operativo de búsqueda, que mantuvo en vilo a la comunidad del Alto Valle, involucró a la Policía de Río Negro, Bomberos Voluntarios de Allen y General Roca, Prefectura Naval Argentina, brigadas especiales y la colaboración de vecinos. Las tareas incluyeron rastrillajes terrestres, acuáticos y aéreos, con el uso de drones, brigadas caninas y embarcaciones que recorrieron el cauce del río en maniobras coordinadas.

El jefe de la Unidad Regional II, comisario José González, explicó que el cuerpo fue avistado por un lugareño que dio aviso a las autoridades. "Se hizo un resguardo del sitio porque no había comunicación y tras fijar el lugar con coordenadas, junto a Prefectura se logró arribar", detalló González. El rescate se vio dificultado por la fuerza del río y la complejidad del terreno, por lo que los efectivos debieron desplazarse río abajo hasta acceder al lugar conocido como La Rinconada. El operativo concluyó cerca de las 4 de la madrugada, cuando el cuerpo fue finalmente extraído y trasladado a la morgue judicial para las pericias correspondientes.

La familia de Enzo, oriunda de Mendoza, reconoció el cuerpo y recibe contención psicológica. Vecinos y allegados destacaron el carácter querido del joven, quien residía en General Roca desde 2020 y había formado una familia en la zona. La desaparición y posterior hallazgo movilizaron a la comunidad y pusieron en foco los riesgos del río Negro, especialmente en sectores no habilitados para el baño.

La investigación judicial continúa para esclarecer las circunstancias del fallecimiento. Las autoridades resaltaron la importancia del trabajo conjunto entre fuerzas de seguridad y la colaboración de la comunidad, que resultó clave para el desenlace del caso. El trágico episodio deja un profundo pesar en la región y reabre el debate sobre la seguridad en los cursos de agua locales.