Un amplio operativo federal realizado en el Alto Valle de Río Negro culminó con la desarticulación de una organización narcocriminal con estructura de clan familiar y presuntos vínculos con Rosario. El despliegue, encabezado por Gendarmería Nacional y la Policía Federal Argentina, incluyó trece allanamientos simultáneos en Villa Regina, Ingeniero Huergo, Valle Azul y Chichinales, donde se incautaron drogas, armas, dinero y vehículos de alta gama.

La investigación, que se extendió por quince meses, involucró análisis de datos, intervenciones telefónicas y vigilancia aérea con drones. Según fuentes judiciales, la banda utilizaba cinco chacras para sus operaciones, incluyendo un invernadero y una plantación activa de marihuana. El juez federal Hugo Horacio Greca, con intervención de la Procuraduría de Narcocriminalidad (PROCUNAR) y la Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos (PROCELAC), ordenó los allanamientos tras reunir pruebas sobre la estructura y el funcionamiento del grupo.

En los procedimientos se secuestraron cerca de un kilogramo de cocaína, casi tres kilos de marihuana, 693 plantas en distintas etapas de crecimiento, siete armas de fuego, 279 municiones, más de 3.9 millones de pesos, 51,933 dólares y trece vehículos. Además, se dispuso el embargo preventivo de bienes y cuentas vinculadas a los acusados. Diez a once personas fueron detenidas, entre ellas el principal investigado, de nacionalidades argentina, chilena y paraguaya, quienes permanecen incomunicados y a disposición de la Justicia Federal.

La causa se originó en 2022 tras una denuncia sobre actividades narco en Villa Regina y zonas rurales. Los investigadores detectaron inconsistencias patrimoniales y maniobras de lavado de dinero, lo que llevó a profundizar la línea de investigación. El operativo generó sorpresa e intriga entre los vecinos, quienes observaron el despliegue de fuerzas federales en distintos barrios.

Las autoridades destacaron el impacto del operativo en la lucha contra el narcotráfico y el compromiso de continuar las investigaciones para desarticular redes criminales en la región. Se espera que la investigación judicial avance en el esclarecimiento de las ramificaciones de la banda y las operaciones de lavado de activos, en un contexto de creciente preocupación por el tráfico de drogas en el país.