En Rosario, la reactivación de grandes obras privadas que permanecían paralizadas desde hace años ha comenzado a transformar el paisaje urbano del centro y otras zonas clave de la ciudad. Según un relevamiento de La Capital, de ocho proyectos emblemáticos que estaban detenidos, tres han retomado su marcha en los últimos meses, aunque el contexto económico sigue presentando desafíos significativos para el sector.

Entre los desarrollos que lograron avanzar destaca el hotel Innnovo, ubicado en San Juan y Dorrego, cuya construcción se reactivó el año pasado y fue inaugurado en abril de 2025. El establecimiento, que cuenta con 11 pisos, piscina, spa y 61 habitaciones, representa un caso exitoso de recuperación tras años de inactividad. Sin embargo, una torre anexa aún permanece en obra y su destino final no está definido.

Otro caso relevante es el del Hotel Express, en la zona de Oroño y Circunvalación. Aunque la cadena Howard Johnson anunció su incorporación y la obra está casi terminada, la apertura depende de la inversión final para equipamiento y personal. "Depende del inversor. Abrirá cuando termine de realizar las obras e instalar el equipamiento del hotel", explicó una fuente del sector.

La Torre Rich, en San Juan al 1000, también reanudó su construcción tras años de parálisis. El proyecto, impulsado por la familia Di Santo, prevé viviendas, espacios comerciales y un restaurante panorámico.

No obstante, otros proyectos como el Grand Hotel en Güemes 2165, edificios en San Martín al 500 y Juan Manuel de Rosas al 900, siguen paralizados por disputas legales, falta de fondos o problemas administrativos. El edificio del Iapos, adquirido por el Estado en los años 80, permanece sin uso y sin planes de reactivación.

El presidente de la Asociación Hotelero Gastronómica de Rosario, Damián Auzumbud, explicó que la falta de rentabilidad y el alto costo de equipamiento dificultan la apertura de nuevos hoteles. "Si no llegás al punto de equilibrio, ¿cuánta plata necesitás todos los meses para sostener esa empresa hasta que sea viable económicamente?", planteó.

El contexto macroeconómico, marcado por la baja en la rentabilidad, inflación y reformas recientes, ha enfriado la economía y frenado nuevas inversiones. Sin embargo, la reactivación parcial de algunos proyectos genera expectativas de que, con una mejora en el panorama económico, más obras puedan completarse y contribuir al desarrollo urbano de Rosario.