Un trágico episodio de inseguridad sacudió la localidad bonaerense de Laferrere, partido de La Matanza, cuando cuatro motochorros asesinaron a una joven e hirieron a su hermana, oficial de la Policía bonaerense, en un intento de robo. El hecho ocurrió en la madrugada del miércoles en la intersección de Carcarañá y Ruta 21, donde Esmeralda Bustamante, de 23 años, y Emilce Bustamante, de 24, circulaban en una moto Honda Tornado.

Según el relato de Emilce, ambas fueron interceptadas por cuatro delincuentes armados que se desplazaban en dos motos. Los asaltantes intentaron robarles y, tras un forcejeo, uno de ellos sacó un arma y disparó varias veces. Esmeralda recibió un disparo en el pecho, mientras que Emilce fue herida en la mano derecha. Los agresores huyeron rápidamente sin lograr sustraer ningún objeto.

Vecinos de la zona alertaron a la policía y a una ambulancia, que trasladó a las víctimas a la Clínica Catán. A pesar de los esfuerzos médicos y de las maniobras de reanimación realizadas por Emilce, Esmeralda falleció debido a la gravedad de sus heridas. Emilce permanece internada, fuera de peligro y bajo observación médica, según el parte policial.

La causa fue caratulada como homicidio y quedó a cargo de la UFI 3 de La Matanza. El fiscal Federico Medona ordenó la intervención de todos los Grupos Tácticos Operativos del sur del distrito para dar con los responsables. El ataque, así como parte del recorrido de los delincuentes, quedó registrado en cámaras de seguridad de la zona.

Este hecho se suma a una preocupante tendencia de violencia en La Matanza, el distrito más violento de la provincia de Buenos Aires, donde en 2024 se registraron 155 homicidios, 11 más que el año anterior. El robo de vehículos a mano armada también ha recrudecido, con 33.000 casos en el último año en la provincia, de los cuales una gran parte ocurrió en la zona suroeste del conurbano.

La comunidad local expresó su conmoción y exigió mayores medidas de seguridad. Las autoridades continúan con la investigación y buscan identificar y detener a los responsables del crimen, mientras el caso reaviva el debate sobre la inseguridad en el conurbano bonaerense.