El próximo jueves 6 de noviembre, los bancos de toda la Argentina permanecerán cerrados en conmemoración del Día del Bancario, una jornada que tiene carácter de feriado laboral para los empleados del sector financiero. La medida, confirmada por el Banco Central de la República Argentina (BCRA) y la Asociación Bancaria (AB), afectará tanto a entidades públicas como privadas, suspendiendo la atención presencial en todas las sucursales del país.

Durante esta fecha, no habrá actividad en ventanilla ni atención comercial, lo que implica la suspensión de depósitos, extracciones, compra de dólares, apertura o cierre de cuentas, trámites de créditos y gestiones administrativas. El artículo 50 del convenio colectivo de trabajo establece expresamente el Día del Bancario como jornada no laborable, respaldando legalmente la suspensión de la actividad presencial.

La celebración recuerda la fundación de la Asociación Bancaria el 6 de noviembre de 1924 y los primeros hitos del sindicalismo bancario argentino, como la primera huelga del sector en 1919. Estos acontecimientos marcaron el inicio de la organización colectiva y la consolidación de derechos laborales para los trabajadores bancarios.

A pesar del cierre de sucursales, los clientes podrán operar normalmente a través de canales digitales, como homebanking, aplicaciones móviles, cajeros automáticos y terminales de autoservicio. Será posible realizar pagos, transferencias, consultas de saldo, inversiones y constitución de plazos fijos. Además, quienes necesiten efectivo podrán retirarlo en supermercados, farmacias y comercios adheridos al sistema de "extracción en comercios".

El Banco Central recomienda a los usuarios anticipar trámites y retiros de efectivo para evitar inconvenientes durante la jornada de inactividad. Las operaciones con vencimiento el 6 de noviembre se trasladarán automáticamente al siguiente día hábil, sin generar intereses ni penalidades.

El cronograma de feriados bancarios incluye otras fechas en noviembre y diciembre, lo que afectará la actividad financiera en varias jornadas. La medida es aceptada como parte de los derechos laborales del sector y no ha generado controversias significativas entre los actores involucrados. El cierre de los bancos por el Día del Bancario refuerza la importancia histórica y sindical del gremio, mientras que la continuidad de los servicios digitales garantiza la operatividad para los clientes.