El fuerte viento Zonda que azotó la provincia de Mendoza durante el jueves y la madrugada del viernes generó al menos 90 incidentes en distintos departamentos, según un informe preliminar de la Dirección Provincial de Defensa Civil. Las ráfagas, que alcanzaron intensidades variables en cada zona, provocaron la caída de árboles, incendios forestales y problemas en el tendido eléctrico, afectando principalmente a los municipios de Lavalle y Maipú.

En Lavalle se reportaron 17 incidentes, de los cuales 11 correspondieron a árboles caídos. Maipú, por su parte, registró 13 incidentes, incluyendo 8 árboles caídos y 5 problemas con transformadores y cables de luz, lo que derivó en cortes de energía en varios sectores. Ante la magnitud del fenómeno, la Dirección General de Escuelas decidió suspender las clases vespertinas y nocturnas en Lavalle, Luján de Cuyo y Santa Rosa, priorizando la seguridad de estudiantes y docentes.

El Servicio Meteorológico Nacional emitió una alerta amarilla por vientos fuertes para Mendoza y otras provincias, como Tucumán, donde las ráfagas podrían superar los 100 km/h. En Mendoza, se espera el ingreso de un frente frío desde la madrugada del viernes, lo que provocará un marcado descenso de la temperatura y precipitaciones aisladas, incluyendo nevadas de intensidad moderada en la cordillera. Para el fin de semana, el pronóstico anticipa jornadas más estables, con ascenso paulatino de la temperatura y heladas parciales durante la mañana.

Las autoridades recomendaron evitar actividades al aire libre, asegurar objetos susceptibles de volarse y mantenerse informados a través de los canales oficiales. "La prevención y la rápida respuesta son fundamentales ante este tipo de fenómenos", señalaron desde Defensa Civil. El viento Zonda, característico de la región andina, suele estar asociado a cambios bruscos de temperatura y condiciones meteorológicas extremas, por lo que la población debe permanecer atenta a nuevas actualizaciones y recomendaciones.

El evento se enmarca en una temporada de variabilidad climática, con implicaciones para la seguridad y el bienestar de los habitantes de Mendoza y otras provincias afectadas. Las autoridades continúan monitoreando la situación y coordinando acciones para mitigar el impacto de los vientos y sus consecuencias.