Un joven de 18 años fue detenido en Hurlingham acusado de asesinar a su amigo de 32 años tras una discusión en plena calle, un hecho que conmocionó a la comunidad local. El crimen ocurrió el pasado miércoles 29 de octubre en la intersección de las calles Bradley e Inés de Pons, en el barrio Villa Tesei, y fue registrado por cámaras de seguridad municipales.

Según la reconstrucción policial, Sebastián Demichelis, el presunto autor material, se encontraba junto a la víctima, Diego Eduardo Consencao, y un tercer joven, Ezequiel Moran, de 17 años, cuando una discusión entre los amigos derivó en violencia. Demichelis descendió de su bicicleta, entregó el rodado a su acompañante y, tras una breve disputa, extrajo un arma de fuego de un bolso y disparó dos veces contra Consencao, quien intentó huir pero fue alcanzado por los proyectiles en el tórax y la pelvis.

Vecinos que presenciaron el hecho alertaron al 911 y relataron la secuencia a los medios: “Vi que se estaba desangrando. Solo pido justicia, por él y por su familia”, expresó una testigo. La ambulancia tardó más de 20 minutos en llegar, mientras la víctima intentaba protegerse en una casa cercana. Consencao fue trasladado al hospital local, donde falleció poco después debido a la gravedad de las heridas.

La Policía Científica incautó tres vainas servidas y un proyectil calibre .40 en la escena del crimen, elementos que resultaron clave para la investigación. El Grupo Táctico Operativo de la Policía Bonaerense logró detener a Moran el mismo día del hecho, mientras que Demichelis fue capturado posteriormente. Ambos son residentes del barrio y el principal sospechoso cuenta con antecedentes penales por robo calificado.

La causa está siendo investigada por la Unidad Funcional de Instrucción N°3 y la UFI del Joven N°2 del Departamento Judicial Morón, que buscan esclarecer las circunstancias exactas del homicidio. El episodio, ocurrido a plena luz del día y frente a varios testigos, reavivó el debate sobre la seguridad en la zona y la respuesta de los servicios de emergencia. La comunidad local permanece consternada y exige justicia por la víctima, mientras continúan las diligencias judiciales para determinar responsabilidades y posibles implicaciones futuras.