El barrio náutico Albanueva, en Tigre, se encuentra en el centro de una controversia tras la revelación de que Fabián Sambucetti, empresario y ex proveedor del Estado, reside en el lugar pese a haber sido condenado por abuso sexual agravado contra su hijo menor de edad. La noticia, confirmada por registros de expensas y antecedentes judiciales, generó una inmediata reacción de los vecinos, quienes iniciaron una campaña para exigir su expulsión del barrio.

Sambucetti fue condenado en julio de 2023 por el Tribunal Oral número 21, fallo que luego fue ratificado por la Cámara de Casación de la Ciudad de Buenos Aires. Según la querella, el abuso se habría producido en reiteradas ocasiones entre 2014 y 2015. La presencia del empresario, cuya vivienda se extiende sobre dos lotes valuados en más de un millón de dólares cada uno, generó alarma en una comunidad compuesta mayoritariamente por familias con hijos en edad escolar.

El malestar vecinal se intensificó tras una fiesta realizada recientemente en la casa de Sambucetti. "No queremos convivir con una persona condenada por un delito tan grave", expresaron algunos residentes, quienes impulsan medidas para su expulsión. Hasta el momento, Sambucetti no ha realizado declaraciones públicas sobre la situación.

El empresario, además, cuenta con antecedentes judiciales por evasión impositiva y deudas millonarias en los años 90, aunque nunca cumplió condena por esos hechos. Su empresa, Rhasa, fue beneficiaria de contratos estatales durante el kirchnerismo, aunque la anunciada compra por parte de Enarsa y Pdvsa nunca se concretó.

El caso reaviva el debate sobre la convivencia con personas condenadas por delitos graves en barrios privados y plantea interrogantes sobre los mecanismos de control y exclusión en este tipo de comunidades. La situación sigue generando preocupación y debate entre los vecinos, mientras se esperan definiciones sobre el futuro de Sambucetti en Albanueva.