El reciente anuncio de la compra de seis aviones F-16 por parte del gobierno argentino generó un fuerte cruce entre el presidente Javier Milei y el exministro de Defensa Agustín Rossi. Durante un acto en la base militar de Río Cuarto, Córdoba, Milei defendió la adquisición como un paso fundamental para recuperar la soberanía y fortalecer a las Fuerzas Armadas, argumentando que su gobierno busca revertir "décadas de destrato" y dotar al país de capacidades militares modernas.

En su discurso, Milei criticó duramente al kirchnerismo, acusándolo de haber dejado a la Argentina "pobre e indefensa" y de utilizar la dictadura con fines políticos. "La verdadera soberanía requiere prosperidad económica y capacidades militares que permitan defenderla", afirmó el mandatario, quien también reivindicó el rol de las Fuerzas Armadas en la historia nacional.

La respuesta de Agustín Rossi no se hizo esperar. El actual diputado nacional y exministro de Defensa sostuvo que "no es soberanía comprar aviones que no sirven para disuadir a los ingleses por Malvinas". Rossi argumentó que los F-16 adquiridos no tienen capacidad disuasoria en el Atlántico Sur y que la decisión del gobierno prioriza el alineamiento con Estados Unidos y Gran Bretaña, principales socios en la fabricación de estos aviones. "Hubiese sido una decisión soberana si se hubieran comprado los aviones JF-17 chinos, que sí hubieran significado una acción disuasoria muy fuerte en el Atlántico Sur", señaló Rossi.

El exfuncionario también criticó la posible instalación de una base militar estadounidense en Ushuaia y el recorte presupuestario en defensa, advirtiendo sobre el impacto negativo en el personal militar y en la capacidad de reequipamiento de las Fuerzas Armadas. "Soberanía no es tener al personal militar con los salarios más bajos de los últimos años ni eliminar el FONDEF", enfatizó.

El debate sobre la compra de los F-16 expone las profundas diferencias entre el oficialismo y la oposición respecto a la política de defensa y la relación con potencias extranjeras. La disputa por la soberanía de las Islas Malvinas y la estrategia militar argentina continúan siendo temas centrales en la agenda nacional, con posturas encontradas sobre cómo garantizar la autonomía y la seguridad del país en un contexto internacional complejo.