El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) emitió una alerta amarilla por tormentas para la Ciudad de Buenos Aires, el conurbano bonaerense y varias provincias del centro del país, tras una semana marcada por una intensa ola de calor. Según el organismo, se esperan lluvias de variada intensidad, algunas localmente fuertes, acompañadas de actividad eléctrica, granizo ocasional y ráfagas de viento que podrían alcanzar los 70 kilómetros por hora.

El sábado, la temperatura en Buenos Aires superó los 34 grados, pero con la llegada de las nubes y las primeras precipitaciones, el termómetro descendió abruptamente más de seis grados en apenas una hora. El SMN prevé que las tormentas se intensifiquen durante la madrugada y la mañana del domingo, con una probabilidad de lluvias fuertes especialmente por la tarde. Se estima que los valores de precipitación acumulada oscilarán entre 30 y 70 milímetros, aunque podrían superarse en algunos puntos específicos.

El fenómeno no solo afecta al Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), sino también a provincias como San Luis, Córdoba, Mendoza, La Rioja, Tucumán y Santiago del Estero, donde rigen alertas amarillas y naranjas según la severidad de las tormentas. En Córdoba, por ejemplo, se esperan ráfagas de hasta 90 km/h y precipitaciones que podrían superar los 110 mm en forma puntual.

El Río de la Plata también experimentará una crecida moderada, con pleamares de hasta 2,7 metros en el Puerto de San Fernando. Ante este panorama, el Gobierno porteño recomendó a los vecinos evitar transitar por calles anegadas, asegurar objetos sueltos en balcones y terrazas, y no manipular artefactos eléctricos que hayan estado en contacto con el agua. Además, se aconseja no circular por zonas arboladas ni tocar cables o columnas de alumbrado durante los episodios de viento fuerte o lluvia.

Las autoridades insisten en la importancia de la prevención y la atención a los comunicados oficiales. Se espera que el lunes las condiciones climáticas mejoren, con temperaturas más templadas y sin pronóstico de lluvias intensas, aunque el calor podría regresar hacia el final de la semana. El SMN y los gobiernos provinciales continúan monitoreando la situación y actualizando las alertas según la evolución del clima.