Brian Bilbao, considerado el narco más buscado de Santa Fe y uno de los principales líderes del tráfico de cocaína en Argentina, fue detenido este martes en Exaltación de la Cruz, provincia de Buenos Aires, en un operativo coordinado por Gendarmería Nacional y la Procuraduría de Narcocriminalidad (Procunar). La captura se produjo tras una extensa investigación que incluyó seguimientos, inteligencia y el monitoreo de vuelos irregulares en la región centro del país.

Bilbao, de 48 años, fue interceptado mientras conducía una camioneta que transportaba cerca de una tonelada de cocaína, según estimaciones de las autoridades. El operativo permitió incautar armas, dinero en efectivo, vehículos y documentación falsa, además de la droga. "Patoruzek", como era apodado, estaba prófugo desde 2023 y figuraba en la lista de los más buscados, con una recompensa de hasta 50 millones de pesos por información sobre su paradero.

La organización criminal liderada por Bilbao utilizaba avionetas para trasladar cocaína desde Bolivia y Paraguay hacia Santa Fe y Buenos Aires, empleando pistas clandestinas y sofisticados sistemas de comunicación y vigilancia. La estructura contaba con hangares propios y una flota aérea operada por pilotos profesionales, algunos de origen colombiano. Además, la banda había desarrollado un esquema de lavado de dinero a través de empresas, bares, taxis y franquicias de medios de comunicación, con base en Rosario.

El arresto de Bilbao se suma a la detención previa de otros miembros clave de la organización, como su hermano Waldo y Pablo Raynaud, debilitando significativamente la red. La investigación, iniciada en 2020 tras un operativo que terminó con dos muertos y la incautación de celulares, permitió reconstruir la trama del grupo y vincularlo con otros grandes decomisos, como el de 475 kilos de cocaína en Andino en 2024.

Las autoridades consideran que la caída de Bilbao representa un golpe importante al narcotráfico en Argentina. La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, celebró la captura en redes sociales, destacando el trabajo conjunto de las fuerzas federales. La Justicia Federal deberá ahora definir la situación procesal de los detenidos y profundizar la investigación sobre el lavado de activos y las ramificaciones internacionales de la organización. El caso pone de relieve la sofisticación y alcance de las redes de narcotráfico en el país, así como la necesidad de fortalecer los controles y la cooperación interinstitucional para combatir este delito.