El Gobierno argentino formalizó el llamado a licitación para concesionar el parque Tecnópolis, ubicado en Villa Martelli, provincia de Buenos Aires, a operadores privados bajo un esquema de participación público-privada. La medida, oficializada mediante una resolución de la Agencia de Administración de Bienes del Estado (AABE) y publicada en el Boletín Oficial, establece que el predio seguirá siendo propiedad estatal, pero su gestión y explotación comercial estarán a cargo de un operador privado durante 25 años, con posibilidad de una prórroga de 12 meses.

El canon mensual inicial fue fijado en 611 millones de pesos, y la concesión abarca una superficie de más de 509 mil metros cuadrados. El futuro concesionario deberá asumir la gestión a partir del 1 de julio de 2026, respetando los acuerdos de programación público-privada ya comprometidos para el resto del año. El parque mantendrá su destino principal para actividades recreativas, culturales, de esparcimiento y de integración comunitaria, permitiendo también propuestas deportivas no competitivas y talleres.

Desde el Ejecutivo, el vocero Manuel Adorni señaló que la decisión responde a la necesidad de dejar de financiar "uno de los activos más deficitarios del Estado" y avanzar hacia un modelo de administración que garantice el funcionamiento del parque sin generar nuevas erogaciones para las cuentas nacionales. "Nunca más será una carga para los bolsillos de los argentinos", expresó Adorni en redes sociales.

Tecnópolis fue inaugurado en 2011 durante el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner como un espacio público y gratuito dedicado a la ciencia, la tecnología y la cultura. A lo largo de los años, el predio fue objeto de debate político y presupuestario, con defensores que resaltan su valor educativo y cultural, y críticos que cuestionan su sustentabilidad económica y el uso partidario del espacio.

La actual gestión, encabezada por Javier Milei, impulsa una política de reducción del gasto público y reordenamiento de los bienes estatales. Según estimaciones oficiales, la concesión permitirá recaudar 1.400 millones de pesos anuales por alquileres y proyecta ingresos de 2.749 millones en 2025. El proceso licitatorio se realizará de forma electrónica y bajo estrictos mecanismos de control estatal, asegurando que el predio retorne a la órbita pública una vez finalizado el contrato.

El futuro de Tecnópolis, bajo este nuevo esquema, estará marcado por la búsqueda de autosustentabilidad y la preservación de su función pública, en un contexto de ajuste fiscal y debate sobre el rol del Estado en la gestión de espacios culturales y recreativos.